Inteligencia o Investigación

Las estimaciones de la cantidad de corrupción relacionada con las adquisiciones varían, pero todas indican que las sumas involucradas son significativas

Por ejemplo, una estimación de la cantidad de soborno en todo el mundo es de 1 billón de dólares. Otras estimaciones indican que entre el 20 y 30 por ciento del valor de las adquisiciones puede perderse a través de la corrupción cuando es sistemática, indicando  cantidades muy elevadas, ya que se estima que las compras en sí constituyen el 15 por ciento del producto interno bruto en los países de la OCDE, un mayor porcentaje en las economías en desarrollo y hasta el 45 por ciento del gasto público en algunas economías.

La corrupción en la contratación pública incluye el soborno, la malversación de fondos, la apropiación indebida, el desvío de bienes, el intercambio de influencias y el desempeño o incumplimiento de un acto, en violación de las leyes, por un funcionario público en el desempeño de funciones, con el fin de obtener una ventaja indebida para sí mismo o para otra persona o entidad.

Gran parte de la corrupción en las adquisiciones pasa desapercibida o se detecta después de que se acaba el dinero o un proyecto falla, dejando a los funcionarios públicos con pocas opciones para recuperar la pérdida. El riesgo de "quedar atrapado" es pequeño en comparación con el potencial de ganancias financieras, por lo que vale la pena el riesgo para muchos.

El artículo 9 de la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción requiere que las naciones del partido tomen los pasos necesarios para establecer sistemas apropiados de adquisición, basados en la transparencia, la competencia y los criterios objetivos en la toma de decisiones que son efectivos para prevenir la corrupción y puedan verificar la correcta aplicación de las reglas y procedimientos.

La gran cantidad de adquisiciones individuales puede abrumar rápidamente a una autoridad de supervisión, retrasando la finalización del proceso de adquisición y el inicio del contrato. Una de las respuestas ha sido aumentar el umbral de autoridad de las entidades de adquisiciones, aumentando así el número de adquisiciones que no están sujetas a revisión. Como resultado, las adquisiciones que deberían revisarse por fraude y corrupción no lo son. Al mismo tiempo, el número de contratos que caen justo por debajo del nuevo umbral puede aumentar para evitar la revisión.

goPRS ofrece una mejor solución para responder a la cantidad de adquisiciones que necesitan revisión. Los datos y documentos se transfieren automáticamente de la entidad de adquisiciones a la autoridad de supervisión para su revisión. Las entidades de adquisición reciben retroalimentación inmediata sobre si una solicitud está completa o si se necesita información adicional. goPRS puede realizar controles en las adquisiciones individuales para detectar indicios de fraude y en todas las adquisiciones para detectar patrones de comportamiento sospechoso que indiquen posibles daños, como la falsificación de ofertas, la colusión y los conflictos de intereses.